-EL BURRO-


Silvia Sanchez



 

Un día, el burro de un campesino cayó en un pozo. El animal lloró y lloró durante horas, mientras el campesino trataba de hacer algo.



Finalmente, decidió que el burro era muy viejo, el pozo estaba seco y de todas formas necesitaba ser tapado. Realmente no valía la pena sacar al burro del pozo...



Invitó a sus vecinos para que vinieran a ayudarle. Cada uno tomó una pala y empezaron a echar tierra al pozo.



El burro se dio cuenta de lo que pasaba y lloró mucho. Pero después de unas cuantas palas de tierra, para sorpresa de todos, se calmó.



 

 

 

Los campesinos intrigados, miraron al fondo del pozo y se sorprendieron de lo que vieron...


 

 

Con cada pala de tierra que los campesinos habían echado al pozo, el burro había hecho algo increíble: se había sacudido la tierra y la pisaba formando un suelo cada vez más alto.



Por lo que, en tan solo unos minutos, el burro había vuelto a encontrarse con su amo y este se disponía a volver a casa feliz y aún sorprendido de lo que su burro había sido capaz de hacer.


El emprendedor no espera que otro lo “empuje” a realizar sus metas, pues nadie las conoce mejor que el mismo. Cada uno de nuestros problemas es una oportunidad. Podemos salir de los hoyos más profundos si no nos damos por vencidos...



 

 

 

 

 

-FIN-